¡Walid el langostero rebeu quiere una buena corrida y es Ptit Jo quien se la va a tener que meter! Pero por una buena polla rebeu la guarra está dispuesta a todo. Sobre todo cuando el macho se pone dominante y le dice quien manda. «Ptit Jo» va a darlo todo, metiéndosela hasta la garganta desde la primera toma. Tiene la boca llena, los ojos húmedos, bosteza, se saca mocos, pero el trabajo está hecho: se ocupa del bulto de Pacha como una buena zorra, que le felicita con insultos. Encantado de ser la guarra de un langostero rebeu dominante, el mamón va a dar su agujero y a que le marquen las nalgas con semen. Está claro: ¡para Walid, el paso a su culo siempre estará abierto!
