Choppeur, después de una intensa serie de flexiones, está ardiente y necesita ser succionado. Con la cara cubierta, sudoroso y con la polla ya bien dura, hace venir a Jean-Luc, un sumiso experto en mamadas, para una sesión verbal muy caliente. Nada excita más a Choppeur que ser dominado, escuchar las órdenes de un rebeu autoritario con una voz viril, que le indica cómo adorar su gran polla.
Choppeur toma el control de la situación, caliente y vicioso, habla con Jean-Luc de manera directa y brutal, sabiendo que esto calienta a su sumiso. Cuantas más instrucciones le da, más se libera Jean-Luc y se entrega por completo a la polla de Choppeur. Después de una penetración intensa en su culo, Choppeur decide follar de nuevo la boca de su nuevo juguete sexual para vaciar completamente sus huevos.
