Kalid llegó a casa del trabajo agotado, pero aún tenía algo de energía para un rapidito. Tras despedirse de su mujer y sus hijos, Kalid se limitó a enviar un mensaje a su ligue habitual y le prometió que vendría en 10 minutos.
El tipo es prácticamente vecino de Kalid. También es una buena zorra glotona con una buena polla que a nuestro semental árabe le gusta chupar de vez en cuando. Pero el macho alfa se detiene ahí, de ninguna manera va a recibir una polla en el culo, prefiere desmantelar a los pasivos con su gran garrote.
Los dos tíos se abrazan y pasan al ataque: Kalid se deja mamar, luego chupa a su vez la polla de su vecino. Luego penetra profundamente al sumiso pasivo con su enorme garrote. Le coge el culo como un cabrón y no le da ni un momento de paz.
Tras el sodo a pelo, le cubre la cara con su semen caliente.
