¡Un culo así no se desaprovecha, hermano!
Salim Laroche, el pasivo sexy del barrio, llevaba tiempo sin una buena follada… y lo estaba notando. Por suerte, su colega Rafael llega con su rabo de 22 cm.
Salim ofrece su culazo redondo como quien ofrece un manjar. Entre ellos no hacen falta palabras – solo acción.
En un sótano tranquilo, se la montan dura. La cara de Salim lo dice todo: está gozando. Rafael mete con ganas – porque, seamos claros, un culo así no se desperdicia.
Editar comentario